Nueva alternativa para la hipertensión arterial cuando los fármacos han fracasado. La denervación renal consiste en desactivar selectivamente los nervios renales del sistema nervioso simpático.
La fisiología sugiere que el bloqueo de los nervios simpáticos que llegan al riñón puede revertir la retención de líquido y sal (bajar el volumen de líquido y la carga mecánica) y reducir la liberación de renina inadecuado (detener la cascada perjudicial hormonal antes de que comience). De este modo, la denervación renal también puede disminuir la estimulación eléctrica de los otros miembros del sistema nervioso simpático, tales como el corazón y los vasos sanguíneos, con un efecto adicional antihipertensivo.
Además, el bloqueo de los nervios renales también ha demostrado en varios modelos tener efectos beneficiosos sobre los órganos dañados por la hipertensión crónica, ya que puede reducir el nivel de citocinas y neurohormonas que pueden ser perjudiciales para los vasos sanguíneos, los riñones y el corazón. También, la denervación renal reduce los impulsos generados por la hiperactividad del Sistema Nervioso Simpático, y es probable que sea útil en el tratamiento de varias condiciones clínicas adicionales relacionados con la hipertensión. Estas condiciones, que se caracterizan por el aumento de la actividad del SNS, son: hipertrofia ventricular izquierda, insuficiencia renal crónica, insuficiencia cardiaca, resistencia a la insulina o el síndrome de muerte súbita.
¿Cómo sabemos que la denervación renal es segura? La experiencia en trasplantes de riñón y los intentos directos de la denervación del sistema nervioso simpático sugieren que la denervación renal controlada permite tanto la normalización de la función renal como la presión sanguínea, La cual no afecta las funciones normales del riñón manteniendo electrolitos, control de volumen, o el control de la presión arterial.
¿Cómo es el procedimiento de denervación? En este procedimiento endovascular mínimamente invasivo utilizando un sistema de catéter y andas de radiofrecuencia, se logra alterar los nervios renales a través de las arterias. Produce una denervación renal precisa, completa y replicable sin los riesgos de las cirugías más invasivas. Ésta se realiza por profesionales intervencionistas, un grupo de médicos que están técnicamente capacitados para la manipulación del catéter, dentro de la infraestructura de una sala de hemodinamia.
El tratamiento es mínimamente invasivo permitiendo a los pacientes una pronta recuperación y regreso a su vida normal.
¿Qué impacto tiene el procedimiento en el paciente? Recientes estudios han demostrado la reducción de la presión arterial entre los pacientes con hipertensión no controlada. Este tratamiento puede reducir drásticamente el riesgo cardiovascular de un paciente y permite reducir la necesidad de por vida de medicamentos anti-hipertensivos.